Pistas sin redes ni palos, llenas de basura. Agujeros en las mallas, o directamente sin ellas. Pintadas y grietas en los muros. Desperfectos en el suelo. Es vandalismo en estado puro. Una actitud incívica que denota una evidente falta de consideración y lo que es peor, un preocupante déficit educativo. Sin embargo, y pese a ello, la pasión por el pádel en el barrio de las Virreinas supera con creces el afán gamberro de unos pocos.
Cuatro de las seis pistas de cemento y muro que hay en esta zona se encuentran en un estado impracticable. Aún así, ello no ha podido impedir el nacimiento de una liga de pádel que comenzó con cinco parejas y que hoy sobrepasa el centenar de jugadores. «Si las pistas estuvieran bien, hoy tendríamos el doble de participantes», asegura José Gómez, el presidente de la Asociación Deportiva Pádel Virreinas, entidad promotora de la competición que dio comienzo hace dos años sin pretensiones y de forma un tanto precaria. «Como no había nada, fabricamos los palos y compramos una red», recuerda este vecino de la zona.
Ese fue el embrión de una competición que en enero de 2013 cogió vuelo. «Empezamos con tres grupos de seis parejas cada uno y al mes se desbordó», explica el vicepresidente, Andrés Portillo. En la actualidad, las duplas se reparten en ocho grupos y hay algunas en reserva. «Los equipos se ponen nombres simpáticos y ya estamos teniendo patrocinadores» que apoyan una competición cuyo nivel va oscila entre una 4ª y una 3ª masculina.
En efecto, la liga va a más. Todo lo contrario que las instalaciones en las que deben desarrollarse los partidos. «Hablamos con el Ayuntamiento porque es quien debe hacerse cargo de estas instalaciones», explica José Gómez, pero las gestiones, hasta la fecha, no han dado resultado. «No es solo un problema de mantenimiento, sino también de control de acceso y uso de las pistas», asegura Andrés que añade además que dos de las pistas ni siquiera tienen luz.
Por ello, y a la espera de obtener la atención del Consistorio en este asunto, «hemos alcanzado un acuerdo con el Restaurante José Carlos (en la Junta de los Caminos, Puerto de la Torre) para poder jugar allí partidos de la liga». Y es que, más allá del recinto, lo que distingue a la Liga de Pádel de Las Virreinas es su excelente ambiente a prueba de vandalismo, un espíritu de supervivencia que se sustenta en su pasión por el pádel.
La liga no tiene final, las inscripciones están siempre abiertas, se admiten todo tipo de parejas (masculinas, femeninas y mixtas) y no se requiere cuota. «Las personas interesadas sólo tienen que contactar con nosotros a través del foro (http://padelvirreinas.gratisforo.es) o del email ([email protected]) y darnos sus datos para que podamos apuntarle». Eso sí, para empezar a disputar los partidos hay que esperar a culmine un ciclo (un mes), al cabo del cual se celebra un acto informal de celebración en el que se procede al sorteo de regalos de los distintos patrocinadores que apoyan la competición.
Y es que al pádel en la barriada malagueña de Las Virreinas no lo frena nadie.
Gracias Nacho por el articulo, esperemos que con tu apoyo nos hagan un poquito mas de caso.
Saludos.
Pues sí. A ver si vuestro esfuerzo da resultado.
Un saludo.
Buen articulo Nacho, muchas gracias y esperemos que de resultado nuestro esfuerzo, un saludo!
Gracias Pepe. A ver si os arreglan las pistas y podéis seguir creciendo.
Un saludo.