En la Ciudad de la Luz, el sol termina por hacer acto de presencia. Por más que el manto de nubes se empecine en oscurecer la central del Club VII, la luminiscencia del astro rey acaba por imponerse y alumbra el triunfo de dos argentinos en la final del World Padel Tour Lisboa Challenger 2017. Allí, con menos público del que debiera, Godo Díaz y Lucho Capra recuperan el esplendor de su juego, algo pálido en este inicio de año.
Lo hacen a costa del triunfador de 2016 en este Challenger de la Ciudad de las 7 Colinas, el malagueño Alejandro Ruiz que forma junto al veterano gladiador Seba Nerone. Godo y Lucho imponen su solidez en este duelo (6-4 y 6-4) y lo culminan con su primer título WPT de 2017.
Final World Padel Tour Lisboa Challenger 2017
Los Challenger de World Padel Tour, vetados a los 16 primeros del ranking, son un cruce de caminos que reúne a dos tipos de parejas. Las que sueñan con ascender, las que necesitan hacerlo. Aspirantes y favoritos. Meritorios y pecadores. Proeza o redención.
Lisboa es la segunda cita Challenger de World Padel Tour en 2017. La primera catapultó a Álvaro Cepero y Fran Stupaczuk en Pilar de la Horadada.
El efecto fue inmediato. El isleño, con Aday Santana, despegó después en Miami hasta las semifinales. El argentino, con Cristian Gutiérrez, cayó en cuartos tras un partidazo ante los números uno. También fue el caso de Ale Galán y Juan Cruz, semifinalistas en Miami tras hacer lo propio en la prueba alicantina.
Ahora, en la capital lusa, 66 parejas aspiran a impulsarse cumpliendo sueños o purgando penas. La gloria es mucho más que un puñado de puntos del ranking y un trofeo. Es una promesa o un propósito de enmienda.
La renuncia de Jordi Muñoz y Pablo Lijó a disputar la prueba (la última juntos) y el tempranero traspié de los favoritos de la estadística, Marcello Jardim y Juan Lebrón (pierden en su debut ante Nacho G. Gadea y Germán Tamame por 6-4 y 7-6), hace correr los pronósticos.
Ahí emergen dos duplas que persiguen lo mismo: enderezar un complicado comienzo de año. Por un lado, los argentinos Godo Díaz y Luciano Capra que, en su segunda temporada juntos, pierden fuelle en el arranque. En Lisboa, sin embargo, cabezas de serie número tres, recuperan el paso en las primeras rondas (6-2 y 6-3 contra Borja Yribarren y Juan Manuel Vázquez y 6-4 y 6-1 a Matías Marina y Willy Lahoz) y sobreviven en el alambre en semis (6-3, 3-6 y 7-6 contra José Antonio García Diestro y Martín Sánchez, salvando dos bolas de partido en contra) para pelear por el título en la final.
Por el otro lado del cuadro, Alejandro Ruiz defiende el título logrado en el Challenger lisboeta de 2016 y lo hace junto a Seba Nerone como cabeza de serie número cuatro. Su inicio de año no ha estado a la altura de su potencial y, en este primer Challenger internacional de 2017, buscan un impulso redentor. Su necesidad parece empujarles en su trayecto hacia la final, con remontada incluida (7-6 y 6-2 a Christian Fuster y Chico Gomes; 6-0 y 6-3 a Javi Ruiz y Pedro Alonso-Martínez; y 3-6, 6-4 y 6-1 a Nacho G. Gadea y Germán Tamame).
Crónica Final WPT Lisboa Challenger 2017
Para ser grande, sé entero: nada
tuyo exageres o excluyas.
Sé todo en cada cosa. Pon cuanto eres
en lo mínimo que hagas.
Así la luna entera en cada lago
brilla, porque alta vive.
El poema del portugués universal Fernando Pessoa, firmado por su heterónimo Ricardo Reis, anticipa el antológico despliegue de Lucho Capra en la final del Lisboa Challenger 2017. El joven argentino, diana de sus rivales en el arranque del duelo, se muestra tal y como recita el ilustre lisboeta, sin exageraciones ni exclusiones; decidido, afilado, inteligente y determinante en todo aquello que protagoniza. Capra está entero, Capra es grande. Pessoa.
La pegada de Capra se impone
En efecto, Nerone y Ruiz trazan su juego sobre el zurdo de Quilmes desde el inicio. Le exigen en su revés por bajo y le buscan por alto. La respuesta del jugador de Siux es impecable. Afilado con su volea e indescifrable con su remate. Amagos, liftados a la malla y una pegada descomunal que sorprende a sus contrarios.
El ejercicio de Lucho en el segundo juego (1-1) encuentra continuidad en el tercero. Desde el resto, sostenidos en la pegada de Capra, éste y su compañero asaltan el saque de Nerone. Precisamente, un remate de Lucho por tres metros desde la línea de saque certifica un break providencial (1-2).
La conquista, más allá del marcador, descubre las dificultades de Seba y Álex para sostener la iniciativa desde la cinta. Godo y Luciano gobiernan con determinación. Desde el fondo, mueven a Nerone y encuentran camino hacia la cinta. Desde allí, son una amenaza constante.
Avisados del sufrimiento de semis ante Gadea y Tamame, la pareja hispano-argentina reacciona de inmediato para tratar de corregir la fractura. Con un paso al frente, aprietan el saque de Godo. Nerone achica pista, gana red y atrapa a Díaz en la malla para abrir la opción del contra-break. El talento del argentino afincado en Estepona desbarata la oportunidad. Su volea de revés a la malla devuelve el desafío a su rival y le permite sostener el servicio para consolidar la brecha (1-3).
Con la ventaja adquirida, Godo y Lucho administran cada saque con mucha solvencia. Inabordables desde la cinta, le niegan resquicio alguno a Nerone y Ruiz que ceden la primera manga (4-6).
Godo maneja los hilos
El guión se mantiene en el segundo acto. Nerone y Álex, muy irregulares, no hallan el modo de discutir el gobierno del duelo. Al saque, Godo y Lucho siguen inaccesibles. Capra mantiene su nivel mientras que el de Orygen encuentra pista para domar el juego.
A su afilado desempeño se une, además, un evidente deterioro en las prestaciones de sus contrarios. Seba y Álex, víctimas de numerosos errores e imprecisiones, apenas inquietan desde el fondo. Un guarismo resulta clarificador en este aspecto. En todo el segundo set, el malagueño y el argentino no alcanzan a sumar más de tres puntos en los cinco juegos al resto que disputan.
Al saque, sin embargo, sufren casi siempre el empeño de sus adversarios. El panorama no es prometedor para Nerone y Ruiz. El terrible presagio se materializa en el noveno. Un escorzo de Godo le permite exhibir su mágica muñeca en la cinta y descubre el ángulo en el revés de Nerone, junto a la malla. Un prodigio que abre una oportunidad de quiebre al saque del malagueño. Suficiente. Una salida de pared de Álex Ruiz directamente a la red entrega su servicio y, prácticamente, la final de este Lisboa Challenger 2017.
El ganador de 2016 cede el testigo a aquellos a quienes, entonces, derrotó en semifinales. Lisboa encumbra a Godo Díaz y a Lucho Capra (6-4 y 6-4). Los argentinos se encaraman al éxito en la Ciudad de la Luz en busca de más. Godo y Lucho vuelven a ser grandes.
Porque yo soy del tamaño de lo que veo, y no del tamaño de mi estatura. Fernando Pessoa (Lisboa, 1888 – 1935).