Cuando le toca el turno de hablar no tiene palabras. Trata de buscarlas para hablar de la difícil victoria que acaban de conseguir pero no las encuentra. En su lugar, ofrece aquello que mejor explica el momento: lágrimas.
Su compañero, Miguel Lamperti, toma la palabra y resume el torrente emocional que embarga a su amigo, Juani Mieres, tras el triunfo obtenido en el último enfrentamiento de cuartos de final del Cervezas Victoria Mijas Costa del Sol Open 2017.
Ante el micro oficial de World Padel Tour, El Canoso sale en auxilio de su compañero. Como lo hace durante toda la noche sobre la moqueta, ante dos fabulosos rivales, Aday Santana y Álvaro Cepero, y en medio de un vendaval de viento que convierte el encuentro en un precioso ejercicio de funambulismo.
Porque el carismático Lamperti se echa el duelo a la espalda y firma una auténtica exhibición de temple, sacrificio, solidaridad, inteligencia y maestría. Prácticamente sin remates, la estrella de Nox maneja el juego y gobierna el tempo. A su lado, Mieres crece y recupera sensaciones tras más de seis meses sin competir, lesionado de la rodilla.
Reapareció en Valladolid y, ahora en Mijas, en su segundo torneo de la temporada, El Hispano se mete en semis tras una gran actuación sustentada en el hiperactivo despliegue de Lamperti.
Cuartos de final WPT Mijas Open 2017
Mieres y Lamperti doman el viento
El viento, la humedad y la notoria lentitud de la moqueta de la pista central descartan el remate como el recurso habitual de resolución. En su lugar, el juego requiere de más tajo de la cuenta en busca de la fisura en la cancha contraria.
Pronto lo entienden las dos parejas. Los intercambios se eternizan, los puntos son kilométricos, y la respuesta de los cuatros, sublime. Aday y Cepero, en el cuarto, a punto están de golpear primero. Una bajada del canario la bloquea Lamperti a la red. Es una oportunidad de break, la primera. Pero el isleño Chiqui Cepero, en un cara a cara en la red, trata de definir con su volea, no mide bien y la estrella en la red. Los argentinos amarran el saque de El Canoso (2-2) y aprovechan su opción en el séptimo. El servicio es de Cepero que sufre un calvario con hasta siete bolas de rotura en contra. La última la transforma Lamperti, infranqueable para sus contrarios, cuando se anticipa a una salida de pared de Santana, irrumpe en la red y le acuchilla con la volea (3-4).
Pueden Aday y Cepero cerrar la brecha de inmediato en el octavo. Un paralelo prodigioso del andaluz de Wingpadel deja a Lamperti por los suelos y abre la ocasión del contra-break. Pero no la aprovechan (3-5) y tampoco en el décimo. Con saque de Mieres, un globo de éste se marcha al cristal de fondo y compromete su propio servicio. Pero Cepero, que busca darle continuidad al juego con un revés a dos manos a una pelota que se le echa muy encima, acaba fallando el golpe y desperdiciando la oportunidad.
Lamperti y Mieres le echan el cierre al primer acto (3-6) y hacen bueno su dictado.
Porque son ellos quienes imponen el ritmo con un magistral ejercicio de control. Son dos prestidigitadores que desafían el viento con globos milimétricos que empujan a sus rivales, que les incomodan, que les asfixian mientras les despejan el camino hacia la cinta. Lamperti busca a Santana con insistencia. Le confina en su esquina y abre camino para que Mieres irrumpa en la red. Por su parte, el de Dunlop se mide con Cepero en un precioso duelo cruzado. La respuesta de la dupla española está a la altura.
El segundo parcial, sin embargo, arranca con otro guión. Los pupilos de Horacio Álvarez Clementi dan un paso al frente para negarles el espacio a sus oponentes. La solidez de Santana y el vértigo de su compañero les permiten encaramarse a la red para discutir el mando. Así, en el sexto, obtienen la recompensa.
El saque de Mieres salta por los aires. Cepero, que desperdicia una primera ocasión de quiebre al estrellar un globo en el cristal de fondo, enmienda su error y recupera la amenaza al abalanzarse sobre la red para pillar a Juani descolocado. La rotura llega por cuatro metros de la mano de Aday que cierra así un largo intercambio (4-2).
El break y su consolidación (5-2) parecen anunciar un tercer set en la noche mijeña. El isleño es un tornado sobre la alfombra mientras que Aday, con maestría, contiene el ritmo y no se desordena. Lamperti y Mieres reaccionan de inmediato pero no aprovechan cuatro oportunidades de devolver el quiebre al saque de Cepero (5-2).
Chiqui y Aday tienen la opción de finiquitar el segundo acto cuando disponen de una bola de set en el octavo tras un error de Mieres con su víbora. Miguel Lamperti, tras un amago de remate, atrapa con una afilada víbora a Santana en su esquina y disipa la amenaza (5-3).
Con saque del canario, un 40-0 les concede tres oportunidades de abrir la puerta del tercer y último capítulo de esta contienda. Pero la respuesta de El Canoso y El Hispano es absoltutamente descomunal. Un parcial de 9 puntos consecutivos les otorga el ansiado break justo a tiempo (5-4) y equilibra el marcador (5-5).
El tie break resuelve el enfrentamiento. Cepero y Santana acusan la oportunidad perdida. Enfrente, Lamperti, absolutamente encendido, se multiplica desde hace rato. Maneja el globo con maestría, alterna con chiquitas, vuela tapando huecos y descubre ángulos invisibles. Un verdadero recital que libera a Mieres de mucho tajo. Finalmente, en el duelo sobre el alambre, se imponen los dos amigos de Bahía Blanca que amarran el triunfo (6-4 y 7-6) y se meten en semifinales del Open de Mijas.
El abrazo de ambos en la pista, la sonrisa de Lamperti, la alegría de Mieres, da paso a esas lágrimas del jugador capaces de explicar mucho mejor que las palabras seis meses de dolor, de calvario, de incertidumbre, de pesadillas, de soledad, de sacrificio.
Franco Stupaczuk y Cristian Gutiérrez, sin piedad
Sus rivales son los argentinos Cristian Gutiérrez y Franco Stupaczuk que pasan por encima de Pincho Fernández y Lucas da Cunha Bergamini. La historia de este duelo no está durante el juego sino antes del mismo. El extremeño y el brasileño firman sus primeros cuartos de final de un Open de World Padel Tour y lo hacen partiendo de la pre-previa, una gesta que les lleva a disputar un total de siete encuentros cinco días.
El partido en sí tiene poco relato. Gutiérrez y Stupaczuk, con mucho oficio, ahogan a sus rivales en sus propios errores. Pincho y Bergamini, dos artificieros de trinchera, se muestran dispuestos siempre al tajo pero no exhiben el filo necesario para inquietar a sus oponentes.
Aún así, el público que llena unos tres cuartos de la grada, reconoce el mérito de la jovencísima pareja y no sólo le alienta durante el encuentro sino que le premia con una ovación cuando consiguen su primer y único juego de todo el partido.
Finalmente, los argentinos se abren paso a semifinales (6-0 y 6-1) aunque lo hacen reconociendo también el valor de la hazaña de sus oponentes.
Godo Díaz y Lucho Capra despiertan a Galan y Belluati
Hay mucha expectación por presenciar el encuentro de los dos jóvenes que fulminaron a los favoritos al título en este Cervezas Victoria Mijas Costa del Sol Open 2017. Ale Galán y Juan Cruz Belluati se miden a Godo Díaz y Lucho Capra. Visto el ranking de la presa obtenida en octavos, es tentador el riesgo de pensar que el madrileño y el argentino tendrán muchas más opciones ante estos dos argentinos.
Pero la realidad se muestra diferente. Godo y Lucho es una dupla que viene en clara ascensión. Superado un titubeante principio de temporada, suman ya este año dos títulos WPT (dos challengers: Lisboa y Madrid) y su juego continúa evolucionando. Galán y Belluati enseguida comprueban la dificultad del desafío de hoy.
Godo es quien maneja el encuentro. Lo hace con clarividencia y sutileza. A su lado, Lucho cumple con eficacia de veterano. Ambos abren vía por el lado de Belluati que, de inicio, se ve algo superado con errores que lastran su juego. Así, en el tercero, Capra pone a volar a su rival zurdo y éste falla su segunda víbora. La oportunidad de break se transforma cuando a Belluati se le marcha un globo al cristal. Godo había abierto camino hacia la red y Lucho apretó desde la cinta.
La rotura inclina el duelo (1-2) pero la reacción del madrileño y su compañero es inminente. Ale, algo desconectado del juego, pide paso. Juan Cruz afina su juego y sostiene a Capra. Juntos, por primera vez, discuten el gobierno del encuentro desde el resto. Se traduce en una ocasión de quiebre al saque de Capra. Es Belluati quien lo aguanta todo. De atrás hacia adelante, un despliegue fabuloso que contiene a su cruzado y que le acaba doblegando. Sin embargo, ante la oportunidad de romper, les acaba faltando el último paso. El globo de Belluati al cristal de fondo aleja el break y permite a sus contrarios poner distancia (1-3).
Salvado el peligro, Godo y Lucho recuperan el paso y ya no ceden en la primera manga. Su propuesta no tiene fisuras y, con una nueva rotura en el noveno, abrochan el set (3-6).
No es el encuentro imaginado por Ale y Belluati, lejos de la versión ofrecida el día anterior en su sensacional triunfo ante Paquito Navarro y Sanyo Gutiérrez. Lo saben y se aplican en el banco junto a Mariano Amat para liberarse de la tela de araña de sus rivales.
En la reanudación, cambia el escenario. Galán se libera de los grilletes. El de Star Vie se agiganta, ocupa más pista y, a su lado, crece su compañero. Ambos pulverizan el saque de Godo y le dan un nuevo aire al partido (1-0).
Están ante su gran ocasión de reengancharse pero les penaliza la inconsistencia y la falta de claridad. Con saque de Belluati, ante la opción de consolidar el break, se despeñan de forma sorprendente. Tres errores de Cruz (dos con su liftado en cruzado y uno con un remate por tres metros que no define) y un fallo de Galán (que no acierta a cerrar con su pegada) les lleva a entregar el servicio en blanco a sus rivales (1-1).
Belluati niega con la cabeza, consciente de que ese no es el camino. Al otro lado, Godo y Lucho se alimentan de esos errores. En el cuarto, a punto están de quebrar aún más el partido cuando disponen de dos bolas de break al saque de Belluati. El argentino salva la primera y un inoportuno tropezón de Godo que le lleva al suelo desperdicia la segunda (2-2).
Pero, sobre la moqueta, Galán y Belluati no le encuentran el hilo al juego. Lucho, inmenso, agita permanentemente las dudas de su rival de Víbor-a, le empuja al fondo, le achica espacios, y sorprende en la cinta en cuanto coge ruta.
En el octavo, llega la puntilla. Cae el saque de Juan Cruz Belluati que, incluso, comete doble falta. Capra, desatado, certifica el break de forma brillante (3-5).
Galán acude al rescate de su compañero, Le busca en sus tinieblas, le grita. ¡Vamos, Juan, vamos! Es el último arreón de esta formidable pareja que se resiste a dejar de soñar. El último intento de agarrarse. Tres oportunidades de rotura cuando Godo quiere cerrar con su saque. Dos de ellas las falla Belluati (un resto a la red y un error en paralelo). La tercera lleva la firma de Godo que manda con la volea y cierra con el remate (6-3).
Ahí se acaba el duelo (6-3 y 6-3). Ahí concluye el magnífico recorrido de Galán y Belluati en el open de Mijas. Godo y Lucho buscan en semis a Maxi Sánchez y Matías Díaz.
El Tiburón y The Warrior sobreviven a un infierno
Tres horas de partido a pleno sol. Una batalla sin reservas, sin descanso. Una pugna llena de alternativas que abre la jornada de cuartos de final masculinos en la central de Mijas.
Matías Díaz y Maxi Sánchez contra Tito Allemandi y Ramiro Moyano. Con la semifinal como recompensa y la oportunidad perdida como lamento.
La pareja número tres asume el cartel de favorita y se trabaja su condición en un partido fabuloso. El tie break culmina la reacción in extremis de Moyano y Allemandi quienes, tras ir por debajo, consiguen justo a tiempo anotarse el primer set .
En el segundo, Matías Díaz y Maxi Sánchez reaccionan. No aflojan sus rivales. Breaks y contra breaks inauguran el segundo acto hasta que The Warrior y El Tiburón se anotan el parcial.
En el tercero, el físico de éstos se impone y les lleva directo al triunfo (6-7, 6-4 y 6-1).
