Únicamente cuando sale de la pista, acabada ya la agonía, Beíta González recupera los 16 años de edad que tiene. Ahí, rodeada de sus amigas, una vez acabada la batalla, la bestia vuelve a dejarle paso a la adolescente.
Recibe felicitaciones de ellas, de sus padres, de conocidos y, en general, de quienes, aún conmovidos, han tenido el privilegio de presenciar un duelo inolvidable en esta primera ronda del Cervezas Victoria Mijas Open 2018.
El debut de dos malagueñas cara a cara
Su debut, tras más de dos horas de dramático padel, le sitúa frente a otra jugadora de la tierra, la esteponera Mari Carmen Villalba. El encuentro, que sirve finalmente de clausura a la jornada de dieciseisavos del cuadro femenino, acaba por eclipsar a los encuentros del cuadro masculino que se disputan y deja casi vacía la grada principal del club Cerrado del Águila.
Bea González y Cata Tenorio, pareja número seis; y Mari Carmen Villalba y Alba Galán, se desafían en un duelo sin red que las despeña o las eleva.
La expectación crece en cada punto hasta que la pista, la más cercana a la zona de cafetería, acaba rodeada por un público entusiasmado desde el inicio. Y es que no hay respiro desde el primer saque. Villalba y Galán, más atinadas, golpean desde el resto en el primer juego. Sus oponentes sacan pero no gobiernan. Lo aprovechan sus rivales para firmar el primer break (0-1).
Por momentos, los fantasmas de 2017 amenazan a Bea. Los nervios del estreno, las expectativas, presión de jugar en casa, ante su gente,… La perla de Star Vie los disipa de inmediato. Ha pasado un año pero su experiencia se ha multiplicado por tres.
Con Cata siempre dispuesta al tajo, Bea no titubea e irrumpe en la red para imponer su sello. La malagueña gana en la cinta un remate de Mari Carmen que no vuela y devuelve la rotura (1-1).
Consolidan lo adquirido (2-1) y le acaban de dar la vuelta a un mal inicio al obtener, de inmediato, otro quiebre en el cuarto (3-1). La esteponera de Siux es un torbellino que barre la pista sin descanso. No le acompaña en el despliegue Alba, algo más estática y, en ocasiones fuera de sitio, lo que cede la iniciativa a sus oponentes.
Ahí se impone Bea, sostenida por un trabajo impecable de Cata.
Pero Villalba y Galán no se abandonan. La consistencia de la primera es el sustento de la segunda que, cuando encuentra pista, resulta temible con el mazo siempre dispuesto. Ambas se agarran desde el resto y recortan la brecha con un contra-break (3-2).
Se equilibra el marcador (3-3) de una contienda verdaderamente grandiosa, una pugna táctica llena de alternativas, una batalla psicológica repleta de gestos. Molestias que se ocultan, sonrisas que contagian, gritos que buscan intimidar,…
Cada detalle cuenta y puede ser decisivo. En el octavo, de nuevo con saque de Galán, surge otra oportunidad de quiebre a favor de Bea y Cata. Esta vez no consiguen aprovecharla porque la madrileña de Akkeron, después de que Tenorio devuelva un remate de Villalba, se impone en un cara a cara con la argentina.
Todo parece dispuesto para un tie break que parece evitar una providencial rotura. Un resto prodigioso de Villalba encuentra la grieta y abre la opción. Un error de Bea con el globo acaba por confirmarla (5-6).
A estas alturas, el encuentro de Mari Carmen es para enmarcar. Sin errores, con un sentido táctico formidable, capaz de descolgar envíos y achicar la pista como un centella, de medirse en cruzado con Cata y contener a Bea en el paralelo.
Tienen la oportunidad de abrochar el primer acto. Disponen del saque de Galán pero, como en los anteriores, flaquea. Precisamente un fallo de Villalba y un acierto de Bea, que impone su remate en la red, preparan un contra-break que llega cuando Mari Carmen estrella en el lateral un remate (6-6).
La rotura sitúa a ambas parejas sobre el alambre para resolver lo que no han sabido en 12 juegos. Ahí irrumpe Bea que hace añicos su carné, obedece a su instinto y se abalanza valiente sobre la cinta. Su despliegue en este tramo deslumbra y sirve para explicar por qué se inclina la balanza del set a su favor (7-6).
La reacción de Mari Carmen Villalba y Alba Galán
El segundo acto de esta oda al padel femenino continúa sin tregua. Alba y Mari Carmen tratan de mantener en el fondo a la malagueña de Star Vie, conscientes de que es quien tira de la pareja hacia la cinta.
Decididas, encuentran enseguida recompensa a su propuesta. En el segundo juego conquistan el servicio de Tenorio (0-2). El dictado de Mari Carmen Villalba traza la ruta de despegue de Alba. Enchufadas ambas, el riesgo se multiplica.
Con un parcial de 0-3 a favor, parecen inclinar el segundo set. Pero sus rivales se agitan ante el peligro. Aparece Cata para someter a sus contrarias por desgaste. Es la gota que deforma la piedra. En ocasiones, adolece de cierto atrevimiento pero su oficio y sacrificio no admiten duda.
Con la receta Tenorio, llega el break en el quinto. El palique de la argentina le resta filo al juego de sus oponentes y, o bien genera desajustes al otro lado de la cinta o abre camino para la irrupción de Bea. Así, con un fallo de Alba con su volea, surge la rotura (3-2).
Equilibrado del electrónico, el duelo insinúa un nuevo tie break que las protagonistas se empeñan en desmentir. Primero Bea y Cata cuando disponen de dos bolas de rotura en el séptimo al servicio de Alba. Las evitan (3-4) la madrileña y su compañera que se desgañita de camino al banco. ¡Vamos, vamos!, exclama la de la Costa del Sol.
Después, son las pupilas de Ramiro Choya quienes se procuran la oportunidad de desestabilizar el marcador desde el resto. Ellas sí lo consiguen. Un globo fallido de Bea y una chiquita de Alba que pilla a Cata son suficientes para el demarraje (3-5).
Para anotarse el segundo set, Villalba y Galán aún deben superar dos amenazas de rotura. Una dejada sublime de Mari Carmen y un resto a la red de Bea dan al traste con ambas y dan vida a sus oponentes (3-6).
El desenlace, por detalles
Ovaciones, aclamaciones, olas,… El público invade ya las pistas aledañas. Asiste a uno de esos momentos que perduran en la memoria. Mientras, en la Principal, el último duelo de la primera jornada del cuadro masculino apura sus últimos minutos con las gradas casi desiertas.
En esta cancha, en cambio, el tercer set anuncia el desenlace. Es hora de ser valientes. Un juego en blanco para cada dupla muestra la igualdad del pulso (1-1). Pero en los detalles se aprecia el despertar de Alba que, poco a poco, se ha conectado al juego. A ello se suma el trabajo de Villalba. La ecuación resultante trae un break en el tercero (1-2).
Es el momento decisivo para Galán y su compañera. El triunfo pasa por consolidar esta conquista y asestar un golpe anímico a sus rivales de difícil recuperación.
Bea da un paso al frente. Al borde del precicipio, la joven malagueña busca liberarse del acoso contrario. Acorta terreno y busca atajos hacia la cinta. Le ayuda Cata con ello que se esfuerza por secundar la propuesta en cuanto encuentra pista. Así, juntas destrozan nuevamente el saque de Alba y nivelan el encuentro (2-2).
Escalonadas, una de las dos busca el bloqueo en cuanto tiran el globo. Bea con Alba y Cata con Mari Carmen. A partir de ahí, con las riendas en la mano, gobiernan con tino. En el sexto, repiten break (4-2), y ahora sí, resulta definitivo.
La de Star Vie y su compañera de Bullpadel hacen valer su saque y abrochan el triunfo final (7-6, 3-6 y 6-3).
Bea y Cata abren la puerta de octavos.
Otra malagueña en octavos
Durante buena parte del encuentro, en una pista contigua se libra un duelo con menos expectación e igual trascendencia.
Una malagueña está en pista, Raquel Segura, de 17 años de edad. Forma en este torneo junto a Nuria Rovira y suma cuatro partidos en tres días desde su inicio en la Pre-Previa. El último lo disputa por la mañana, el último de la Previa. Un maratón de padel que resuelven con remontada incluida en el tie break del tercer set (4-6, 7-5 y 7-6).
El triunfo les mete en la primera ronda del cuadro principal femenino. Horas después de dicho encuentro, Raquel y Nuria vuelven a la pista para disputar esos dieciseisavos de final del Cervezas Victoria Mijas Open 2018.
Lo hacen contra otra pareja que llega desde la Pre-Previa: Celeste Paz y Laia Bonilla acumulan cinco encuentros desde el lunes, de los que dos de ellos han sido a tres sets. El que ahora les mide a Segura y Rovira, también.
La de Torremolinos y su compañera, después de ceder el primer set de forma inapelable, se rehacen y protagonizan una remontada que les lleva al triunfo (2-6, 7-5 y 6-3).
Hoy disputan los octavos de final y lo hacen, precisamente, ante Bea González y Cata Tenorio.
Junto a ellas está también Carolina Navarro con Ceci Reiter, que han superado su estreno ante Tamara Icardo y Marta Talaván (6-4 y 6-2).