El estruendo que causa el golpeo de la puerta en la malla no es más que el eco del calvario que los jugadores padecen en el interior de la pista. Las imprevisibles rachas de viento atormentan a ambas parejas en la final de 1ª del Torneo de Padel Steel Custom del Hotel Myramar.
Eolo, caprichoso, indomable, muta de aliado a adversario, sin aviso, a su antojo. Lo padecen Paco Ruiz y Carlos Muñoz, una dupla de mucha mano y menos piernas, que encuentra ángulos donde nadie los intuye.
Lo sufren de igual manera Leandro del Negro y Dani Salcedo, una pareja que suma millas en cada partido pese a que alcanza la final tras evitar las semifinales. Sus rivales, Manu Muñoz y Miguel Martín, no comparecen por lesión del granadino.
Final incómoda, sin ritmo, en Myramar Fuengirola
¡Qué bien jugamos los cuatro restando! ¡Qué buenos somos! El lamento desesperado de Paco Ruiz, en mitad del encuentro, diagnostica uno de los síntomas de este enfrentamiento final. El retrato de ambas parejas al resto es horrible. Los innumerables errores convierten cualquier opción de break en una epopeya casi inalcanzable.

Por eso, la rotura de saque que firman Carlos y Paquito al empezar el encuentro adquiere un valor notable. No lo logran, sin embargo, con una puesta en escena arrebatadora. En realidad, son sus rivales quienes les entregan el servicio de Lea. Lo hacen con tres errores consecutivos, el último, una volea de Dani Salcedo que se marcha al cristal de fondo (0-1).
Muñoz y Ruiz aprietan desde el fondo cada bola. Juegan con la inconsistencia de sus oponentes que sufren para tomarle el pulso al encuentro. En este arranque, la mano sublime, prodigiosa, de Carlos Muñoz mece el juego, maneja el intercambio, gobierna el enfrentamiento.
Sin embargo, pronto se nivela el duelo. El viento agita cada jugada, la convierte en un ejercicio terrible de anticipación y reflejos. El juego demanda piernas. Lo entienden Leandro y Dani que se activan. Y aunque antes sufren con su saque, el argentino y de Malakapadel se abalanzan sobre la red en el sexto, con servicio de Carlos Muñoz. Él y Paquito aflojan el paso.
Falla primero el de Padel Goo!!! Lo hace luego el de Pala Padel Pro ante el sensacional arrebato de sus oponentes. La rotura equilibra el marcador (3-3) y abre paso a un nuevo escenario.
Carlos y Paquito sufren ahora el incesante viento. Se desconectan. Utilizan la mano allá donde lo que necesitan son sus piernas. Sus rivales, mucho más dinámicos, mantienen la discusión del juego en un partido incómodo, falto de ritmo, discontinuo.
El tie break conduce la primera manga al desfiladero para su desenlace. Por momentos, la mano de Carlos gobierna el viento. El brazo de Paco aplaca el vendaval. La determinación de Dani se impone a la inclemencia. El dinamismo de Lea sobrevive a la ventolera.
Se resuelve todo justo al final. Tras su primer error, Leandro del Negro se mortifica. Después del segundo, se resigna (4-7). El primer set cae en manos de sus adversarios.

Leandro del Negro y Dani Salcedo se abren paso
Pese a ceder en la primera manga, Salcedo y Del Negro hallan el rumbo para el segundo acto. Solidifican su propio saque y, ahora sí, asaltan el de sus adversarios. Lo firman en el quinto. Con Paco y Carlos clavados en su campo, Lea y Dani conquistan el servicio rival. Primero es el rubio de Malakapadel el que pilla los pies de Carlos. Después, es Lea el que resuelve un duelo de remates fallidos para quebrar el saque de Carlos Muñoz y ponerse por delante en el marcador por primera vez en el partido (3-2).
La ventaja retrata el diferente despliegue de unos y otros sobre la pista. Queda aún más claro en el séptimo. Lea y Dani juegan ahora con la ansiedad de sus contrincantes y se anotan el saque de Paco Ruiz. Un remate de Carlos Muñoz, con todo a favor, directamente al cristal, entrega el saque de su compañero y escenifica la caída de su juego (5-2).
Con esa ventaja, y pese a tener que levantar dos bolas de break en contra, el argentino y su compañero acaban por llevar el segundo set (6-2).
Cambios de estrategia en el set decisivo
El último acto enfrenta dos inercias diferentes. Paco y Carlos han perdido el paso, han extraviado el sitio. Su lucha contra el viento, los rivales, su descenso, se aprecia en cada detalle.

Al otro lado, Lea y Dani han encontrado su velocidad, han acompasado su padel, han logrado acoplarse a la ventolera. El malagueño y el argentino, además, inician el tercer set con una permuta de lado. Del Negro, que hasta el momento se desplegaba desde la derecha, asume el rol de revés en el tramo definitivo. La apuesta a punto está de obtener inmediata recompensa.
Emerge Dani Salcedo, cuyo juego ha ido creciendo en el segundo set. Aquí, gana red y desarma a los rivales. Dos opciones de break les abre camino a la dupla hispano-argentina. Sin embargo, no convierten ninguna de las dos oportunidades. Detalles que penalizan, que les impiden distanciarse, que mantienen con vida a sus contrarios cuando tienen ocasión de ajusticiarles.
Primero, es el resto de Leandro que se queda en la red. Después, una salida de pared del argentino también a la cinta. Finalmente, el juego cae del lado del servicio (1-0).
Dani y Lea buscan su ocasión. El susto reactiva a Carlos y Paquito que aprietan con el saque. Al resto, sin embargo, el genial jugador de Padel Goo!!!, que hasta ahora había optado por la potencia a ras de cinta, asume el mando y cambia el tiro. Ruiz mueve a Lea, le busca en las alturas, le mide por bajo, le envía al fondo. El formidable dinamismo de Del Negro sostiene la apuesta, aunque pierde filo su juego.
Salcedo, espléndido en la red, sufre más al fondo de pista. Carlos, sensacional en el arranque, mucho peor en el segundo set, alterna prodigiosos aciertos con errores inusuales, aunque la amenaza de su mano late en todo instante.
El relato explica la igualdad en el marcador. Sin concesión en los servicios, sin opciones desde el resto. Con todo por decidir, transcurren los juegos en un enfrentamiento sobre el alambre. No hay red ya para las dos parejas que van sumando puntos y descontando ocasiones de distanciarse.

En el noveno, Paquito, con un remate por tres metros, amilana el ímpetu de sus rivales que habían logrado presionar su saque (5-4). En el décimo, al fin, Carlos y Paco encuentran la rendija al servicio de Dani. El remate valiente de Lea, lo devuelve Paquito en la red. Es Carlos quien cierra el debate con una afilada bandeja.
El último punto sitúa a Paco Ruiz bajo los focos. Primero, con una sublime volea paralela, abre espacio y desarma a Dani. Después, con la bola muerta, suspendida en el aire, el mazo del de Padel Goo!!! aniquila la resistencia de sus oponentes y da paso al rugido ganador del feroz guerrero (6-4).
Dos roturas le han valido a Paco y Carlos para hacerse con la victoria. El oficio, la resistencia a la derrota, la mano, les han sostenido en el encuentro.
Sus rivales, Lea y Dani, repuestos de un flojo arranque, encuentran la explicación a su derrota en los detalles. Pese a anotarse tres break, no aprovechan sus opciones y acaban cediendo en esta final de 1ª del Torneo Steel Custom del Hotel Myramar.