¡Vamos Manolo!, se oye en la pista. Es Carlos el que anima a su compañero en el sexto juego del segundo set. Con 1-4 abajo en el marcador y un set en contra, las tres bolas de break de que disponen es la última oportunidad de apretar el partido. ¡Vamos Manolo! ¿eh? anima el gigante de Wilson a su pareja con un 0-40 en la final del Torneo de Pádel Clínica Dental Plocher.
La amenaza pende sobre el servicio de Guillermo Demianiuk que, junto a su pareja, Rafael Méndez, trata de finiquitar el encuentro por la vía rápida. Carlos David del Moral y Manolo Gómez se aferran al azul de la central del club Los Caballeros, apuran sus opciones, tratan de oponer resistencia, castigados físicamente tras un exigente recorrido en el cuadro de la 1ª masculina.
Y es que, Carlos y Manolo, en un duelo agónico, han vencido por la mañana en semifinales a una de las parejas favoritas, Sergio Beracierto y Willy Ruiz. Tres intensos sets acabados en un tie break tremendo y un calor sofocante provocan que ambos, ya en la final, acusen el ritmo impuesto por sus rivales. Por eso, esas tres ocasiones de break se antojan vitales para evitar la defunción de sus aspiraciones.
Pero El Rayo, que no guarda un buen recuerdo de la última (y única) final jugada en ese club (la del torneo inaugural de las instalaciones, tras la que rompió la pareja con Ale Ruiz), está decidido a no demorar más el desenlace. Afila su servicio y se teletransporta hacia la red, el argentino, para gobernar desde la cinta. 15-40 tras un saque magnífico y un remate que saca la bola por cuatro. 30-40 tras otro saque ajustado y una volea definitiva. 40-40 después de un nuevo saque que corta el aire y un remate por tres metros. Manolo y Carlosapenas se miran. Acaban de cerrar la puerta a la posibilidad de entrar en el partido. Dos nuevos servicios (el último, incluso, directo) clavan el 1-5 en la moral de sus rivales, que abatidos, ni siquiera cumplen el trámite con su saque y ceden un nuevo break para cerrar el encuentro (1-6).
Antes, tampoco en la primera manga, Carlos David y Manolo han podido frenar las acometidas de sus oponentes, siempre con un punto más de velocidad en sus acciones desde la primera bola. Demianiuk, desde la derecha, marca el territorio desde el comienzo, con un juego vertiginoso, atrevido, desafiante, que sorprende a sus adversarios y provoca el break a las primeras de cambio (0-1).
El argentino y el sevillano consolidan la rotura al saque con un juego en blanco (0-2) para adquirir una ventaja que refleja lo que ocurre en la cancha. Sus contrincantes tardan en reaccionar ante la emboscada. Poco a poco, Manolo, desde la derecha, va conteniendo la ofensiva, reduce el ritmo de juego y trabaja algo más los puntos para que su compañero entre en juego. Corta la sangría con su saque (1-2), abre camino a Carlos. Contribuye al respiro los errores ajenos. Rafa se atranca con el remate. Demianiuk apura mucho la bola. Hasta tres errores suyos permiten a Carlosmantener el servicio y seguir su estela en el marcador (2-3).
¡Qué burro soy!, se desespera Guille tras un paralelo fallado, antes del segundo punto de inflexión del partido. Sus propios errores colocan el saque de Demianiuk al borde del precipicio. 15-40 y dos oportunidades para empatar. El Rayo, sin embargo, se lanza hacia la red con valentía, exhibe reflejos, velocidad y técnica. Tumbado sobre la bola, obliga a sus rivales, en cada volea, a jugar con las rodillas rozando el suelo y la espalda pegada al cristal. Él y Rafa levantan hasta cuatro pelotas de break en contra, cuatro salvavidas que ni Manolo ni Carlos atinan a enganchar (2-4). No tendrán más en la primera manga.
Rafael Méndez cambia el grip y empieza a martillear a sus rivales por alto. Demianiuk sigue dictando el curso del encuentro con su volea. Manolo se multiplica para sostener sus opciones, mientras que Carlos apenas puede sacar el brazo. 4-6 finaliza el primer set y da paso a un segundo que comienza con dos break y un parcial de 0-4. Demasiado puerto para ambos. Y más si desperdician otras cuatro ocasiones de rotura para el 2-4.
La pareja hispano-argentina se hace con una victoria justa; Carlos David y Manolo Gómezobtienen una segunda plaza brillante, lograda con sudor en cada esquina de la pista.
