Maxi Sánchez y Matías Díaz, nueva pareja World Padel Tour 2016. Dos jugadores graníticos. Dos guerreros irreductibles que no escatiman esfuerzo alguno, que siempre van de frente. Dos gladiadores que llegan tras dos experiencias intensas durante la temporada anterior y que han decidido unir sus caminos en plena marejada de cambios.
The Warrior concluye así su etapa junto a Paquito Navarro. Tras un año en el que han conquistado la segunda plaza del ranking World Padel Tour, el sevillano ha apostado por Sanyo y ha dejado su trayectoria junto al hispano-argentino de Star Vie.
Un título y cinco finales han materializado las prestaciones de una dupla que, por momentos, fue alternativa a los números uno del padel (como en aquella maravillosa final de Valladolid). Pese a un notorio bajón en el segundo tramo del año, el segundo puesto en la clasificación masculina del circuito profesional de padel invitaba a prolongar una experiencia que se ve truncada tras una única temporada.
Si para Mati, el cambio era una posibilidad (que finalmente se ha materializado), para Maxi Sánchez era toda una necesidad.
El de Villa Mercedes ha vivido una temporada singular. Tras los primeros torneos junto a Sanyo Gutiérrez, con quien alcanzó una final (en Ríos Gallegos); le llegó la oportunidad de jugar junto al más grande: Juan Martín Díaz. Su llamada supuso, en sí misma, una recompensa al esfuerzo de tantos años.

Foto: WPT.
Su puesta en escena resultó esperanzadora. Tres finales consecutivas (Mallorca, Málaga y La Nucía) les situaron en disposición de luchar por los títulos. Pero la implacable voracidad de Bela y Lima disipó el espejismo. Las derrotas resquebrajaron su confianza y su juego se hundió. No volvieron a pisar una final hasta Galicia.
El Master Final, cuando su continuidad como pareja no era ya viable, les evitó cerrar en blanco el año.
Junto a Juan Martín, Maxi, como le ocurrió a Mieres, ha sufrido el despiadado escrutinio a que se ve sometido quien acompaña a El Galleguito. Sólo Bela, hasta el momento, ha sido capaz de salir indemne de la devastadora presión de jugar junto a Juan.
En este 2016, Matías Díaz y Maxi Sánchez buscan recuperar el camino de la solidez.
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Matías Díaz y Maxi Sánchez: expectativas para 2016
En World Padel Tour 2016, Matías Díaz y Maxi Sánchez parten como pareja número tres del circuito. Su objetivo está claro: ser competitivos siempre y estar en disposición de luchar por los títulos en cada torneo.
El año pasado, ambos fueron capaces de hacerlo por separado; ahora buscan repetir (con mayor éxito) esta temporada.

Foto: WPT.
4 Fortalezas de Matías Díaz y Maxi Sánchez
Poderío físico envidiable
Por piernas, Matías Díaz y Maxi Sánchez, son infranqueables. En verdad, se trata de dos de los jugadores de World Padel Tour con mejor condición física. Dispuestos siempre para el tajo, responden a las exigencias de sus rivales con un despliegue imponente y les obligan a un gran esfuerzo para superarles.
Gran capacidad defensiva
El de Star Vie y el de Bullpadel son dos jugadores de gran capacidad defensiva. Su resistencia, en este sentido, desgasta a sus rivales a quienes exigen un ritmo alto y mucha precisión para superarles.
Disciplina y firmeza
Matías Díaz y Maxi Sánchez son dos jugadores firmes y con disciplina para estructurar correctamente el juego. Lo han demostrado junto a sus anteriores parejas. Mati, con Cristian Gutiérrez o Paquito Navarro; y Maxi, con Sanyo Gutiérrez o Juan Martín, estaban habituados a sostener el juego y abrir hueco a la fantasía de sus compañeros. Su persistencia y su consistencia son dos de sus grandes virtudes.
Gran Potencia
La que será pareja número tres de World Padel Tour 2016 es una dupla de potente juego aéreo. The Warrior, pese a su estatura, y sobre todo, El Tiburón son muy resolutivos cuando la pelota adquiere vuelo. Será una de las armas que deberán emplear para imponer su sello en los partidos.

Foto: WPT.
4 debilidades de Matías Díaz y Maxi Sánchez
Margen de mejora en el aspecto ofensivo
La pasada temporada, junto a Paquito Navarro y a Juan Martín Díaz, respectivamente; Matías Díaz y Maxi Sánchez tenían bien cubierta esa faceta. Este año, sin embargo, tendrán que afanarse por disputar el gobierno de los partidos sin la presencia de ese compañero que les empuja hacia la cinta.
Necesidad de acoplarse a un nuevo perfil
En los últimos años, Mati y Maxi han jugado junto a jugadores de un perfil muy ‘creativo’. Lo que en el Calcio italiano se denominan fantasistas. Ahora, en cambio, tendrán que acoplarse a otro perfil y asumir, cuando proceda, ese rol para sorprender a sus adversarios.
Huir de la previsibilidad
Acostumbrados a cimentar el juego, el riesgo para ambos este año es que su apuesta resulte muy previsible. Tendrán que idear nuevos caminos, salirse del molde en el que se han desenvuelto en estas últimas temporadas, y ofrecer una cara diferente. Son intensos y rocosos, sí, pero les hará falta más que eso.
Exceso de exigencia
Matías Díaz y Maxi Sánchez son dos de los jugadores más exigentes consigo mismo del circuito. Apenas se permiten un fallo y es frecuente verlos atormentarse ante un error propio. La autoexigencia es un motor fabuloso para crecer. Incluso, sirve de motivación para el propio compañero. Pero, esta fórmula, en exceso y, ahora, por partida doble, va a requerir de algo de mesura.
Análisis Paquito Navarro – Sanyo Gutiérrez
¿Y tú? ¿Qué opinas de estas fortalezas y debilidades? ¿Coincide el análisis con el tuyo? ¿Cómo ves a la pareja Matías Díaz y Maxi Sánchez en este 2016? Queremos conocer tu opinión.
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