Cumplidas las tres horas de partido, en plena disputa del tercer set, sobre la pista central instalada en el Pabellón Menorca, como si fuera un cuadrilátero, dos púgiles se tambalean de un lado a otro. Al borde del KO, se esfuerzan por sostenerse en pie mientras buscan acertar con el golpe definitivo que noquee a su rival.
Así se decide la final femenina del Estrella Damm Menorca Open 2019, con las dos parejas fundidas, tratando de resistir un poco más que la otra en busca de la victoria.
Final femenina WPT Menorca Open 2019
La pelean la pareja 2, Alejandra Salazar y Ariana Sánchez, que persigue algo más que su quinto título del curso; y la hoy pareja 6, Mapi y Majo Sánchez Alayeto, dos hermanas acostumbradas a mirar a sus competidoras desde la cima y a las que ahora les toca perseguir en una remontada que iniciaron el pasado 15 de febrero.
El único precedente de este enfrentamiento tuvo lugar en Cascais con el claro triunfo de las de Manu Martín (6-4 y 6-0). Un mero espejismo.
Las AS se imponen en el intercambio de golpes
Todo ello empuja a ambas desde la primera bola de un primer set de infarto. Desde el saque inaugural de Mapi que asaltan Las AS al duodécimo juego con el que las favoritas se llevan el primer acto, se suceden los intercambios de golpes, como si las dos parejas se mostrasen más cómodas al asalto en campo abierto que tras la barricada.
Son un total de siete roturas de servicio en ese primer parcial que convierten el juego en una montaña rusa de aciertos y errores con un patrón de juego bien claro.
Salazar y Sánchez buscan a Mapi con insistencia. Ari achica espacios, se encarama a la cinta y amenaza posicionalmente a la aragonesa en el paralelo. De esta forma, le abre el juego a su compañera. La madrileña se maneja desde más atrás para irrumpir con su afilada derecha.
Pero el tajo de Mapi es descomunal. Pese a la paliza que acumula en las piernas tras un torneo maratoniano, su coraje le sostiene ante el acoso de sus contrarias.
Muy al final, Ale y Ari consiguen su propósito. Tras desperdiciar cuatro oportunidades, se hacen con el primer parcial justo a tiempo de evitar el tie break (5-7).
Las gemelas esquivan el abismo
No cambia el guión en el segundo acto. En un duelo muy táctico, se buscan ambas parejas desde cada propuesta.
Las AS siguen con su esquema inicial, con Ari muy próxima a la red, intimidante en el paralelo y pendiente de empujar a Majo al fondo desde el cruzado. Es Ale quien barre pista, midiendo desde la derecha la recuperación de Mapi. Busca la de Bullpadel en su rival alguna fisura propia de su inactividad competitiva durante tanto tiempo.
Pero lo cierto es que la aragonesa, pese a que aún le queda, responde de manera encomiable. No le pierde la cara al duelo. Ni ella ni Majo, protagonista de un torneo soberbio.
Y eso que una de sus herramientas principales, el remate, lo tienen hoy limitado las hermanas por las condiciones de humedad de la pista. Así que agitan las piernas, queman moqueta y sostienen cada intercambio con la determinación de siempre, como si no hubieran estado fuera diez meses.
El pulso es intenso, precioso. Como el que firmaron las gemelas en cuartos ante Las Martas. Dos auténticos regalos que nos recuerdan lo que nos hemos estado perdiendo durante toda la temporada.
En el quinto juego, Salazar y Sánchez encuentran una vía que les puede elevar al triunfo. Con mucha contundencia, asaltan el saque de Majo. Es un break en blanco que lleva la firma de Ale, protagonista de un arrebato fulgurante que las sitúa en ventaja (2-3). Es su gran oportunidad.
Pero la reacción de las hermanas está a la altura de la afrenta. Se abalanzan sobre la cinta y devuelven el quiebre de inmediato (3-3). El juego se balancea entre la vocación ofensiva de las Sánchez Alayeto y el empuje afilado de Las AS. El espectáculo niega cualquier pronóstico y empuja el juego hacia la única solución posible: el tie break.
Sobre el alambre, se manejan mejor las aragonesas, más acertadas en los momentos críticos, e igualan el partido (7-6).
Mapi y Majo imponen su forma
La conquista espolea a las de Jorge Martínez que arrancan el tercero con un quiebre (1-0). Pero no consiguen asentar la ventaja. Un kilométrico segundo juego, con servicio de Mapi, acaba cayendo del lado de Ale y Ari que nivelan así el marcador (1-1).
El momento, pese a ser el inicio del tercer acto, desprende aroma los instante clave. Con plomo en los tobillos, las dos parejas se esfuerzan por darle palique al juego en busca de soltar el zarpazo definitivo.
Lo consiguen Mapi y Majo que, en el tercero, vuelven a apoderarse del saque contrario. Una derecha cómoda de Ale que se queda en la red, un error impensable que se explica desde la tensión y el cansancio, provoca el break (2-1).
Es el punto de inflexión del duelo. Las AS sucumben a su propia emboscada. Han puesto a prueba el estado físico de Mapi pero son las que vacían antes su depósito de combustible.
Lo intentarán pero ya no conseguirán anotarse ni un sólo juego más en todo el partido. Con viento a favor, descifrado ya el nudo del encuentro, las gemelas, dos atletas, transitan a velocidad de crucero hacia el triunfo que llega en el séptimo (6-1).
Es Mapi quien lo certifica con su volea de derecha. Hace unos meses soñaba con poder sostener la pala. Hoy, en cambio, protagoniza un partidazo que acaba con esa bola cruzada que derriba definitivamente la resistencia de sus contrarias (6-1).
Se derrumba en el suelo la aragonesa bajo el peso de una extenuante carga emocional. La busca su hermana, ausente también durante el curso pese a que ha seguido compitiendo.
Las lágrimas de Mapi rubrican esta final femenina del WPT Menorca Open 2019. Su llanto ha sido la mejor banda sonora de una actuación conmovedora.
En el tercer torneo que completan juntas en 2019, las gemelas Sánchez Alayeto ya levantan un título. ¡Raza de campeonas!
