Ya están en semifinales. Las AS se meten en la final del Estrella Damm Open 2020 tras un trabajado triunfo ante Patty y Eli.
La pareja 1 del ranking, que buscará su primer título del año, continúa sin ceder ni un solo set en todo el torneo.
Las AS cocinan la semifinal a fuego lento
Las favoritas cocinaron el duelo con mucho temple, sin apurarse. Ante Llaguno y Amatriain, no hay otra fórmula posible. Sobresalió, en este sentido, la de Reus, Ariana Sánchez, muy fina en la construcción del juego e inusualmente atrevida con el remate. Cumplió a la perfección la súplica de su coach, Manu Martín.
Las de Neki Berwig presentaban una trayectoria espléndida en el torneo. No habían concedido ningún set, apenas 11 juegos en contra en tres partidos y se habían cobrado la eliminación de la pareja 3 del ranking en cuartos de final.
La dupla, sin embargo, infatigable siempre en el tajo, se mostró, esta vez, algo errática, incluso, precipitada en ocasiones. En especial, la batalladora Eli, a quien le faltó algo de tino en su despliegue.
No le ayudó una moqueta que escupía la bola con rabia e impedía que pudieran meterle cloroformo al juego. Así que, desde el principio, sufrieron mucho Patty y Eli con su saque. La amenaza de Ale y Ari fue constante y, aunque les costó materializarla, acabaron encontrando el break en el séptimo juego. Se rompió ahí el primer acto.
Las AS se manejaron con mucho oficio durante todo el encuentro, agitando bien a Eli y mostrando colmillo desde la pegada. Les bastó para cerrar la primera parte (6-4).
El segundo parcial tampoco trajo buenas noticias para Llaguno y Amatriain, a remolque desde el inicio tras un encajar una rotura. Trataron Patty y Eli de achicar espacios, de llevar la iniciativa, pero les faltó acierto para que su propuesta dañase el dictado contrario.
Ale y Ari hicieron buena la ventaja y, tras esquivar alguna amenaza en contra, cerraron el triunfo (6-4).
Repiten final por segunda vez este curso. Las AS quieren estrenar el palmarés pero, para ello, tendrán que salvar el escollo de Gemma y Lucía.