No es una persona que busque excusas. Es una luchadora que supera obstáculos. No es una mujer que se resigne ante la adversidad. Es una guerrera tenaz, ambiciosa, irreductible, que transforma cualquier inconveniente en un elemento motivador, una fuente de energía que la lleva a mover montañas. Su palmarés en el padel ha crecido sobre su juego. Su leyenda, en cambio, se ha forjado en torno a su implacable voracidad, un hambre de gloria que le tiene reservado un hueco de privilegio en el Olimpo del Padel.
La malagueña Carolina Navarro mira ya hacia 2014, un año que afronta con el objetivo claro de recuperar el trono mundial del padel femenino. Una corona que, tras tres años consecutivos junto a Cecilia Reiter, cedió la pasada temporada ante las formidables Eli Amatriain y Patty Llaguno, que les arrebataron la primera posición del ranking World Padel Tour en la última prueba.
“Ahora tenemos un reto interesante, motivante y divertido para 2014”, explica a Padelazo la jugadora de Star Vie, con una sonrisa que ilumina su rostro hoy tras haber metabolizado ya la dureza de un año que amagó con apartarla de las pistas.
2013: un año de inestabilidad para Carolina Navarro
Porque, no mucha gente conoce que Carolina Navarro, la mujer que ha conquistado nueve veces la cima del padel femenino, a punto estuvo de no comenzar la temporada 2013. La detección de una enfermedad la obligó a pasar por quirófano de urgencia. “Fueron momentos muy duros”, recuerda la de Málaga sobre esos meses de marzo y abril del pasado año. Mientras sus rivales se ponían a punto en plena pretemporada, ella se enfrentaba a un desafío muy diferente. “No sabía si iba a poder jugar”. Incertidumbre. Preocupación. Un auténtico calvario psicológico.
En junio, una semana después de su intervención, sin apenas entrenamientos, Carol desplegaba su juego en Barcelona, en la primera prueba del WPT 2013. Cayó ante las gemelas Sánchez Alayeto, en cuartos de final (6-3, 6-7 y 7-6) en la primera gran exhibición de las formidables hermanas aragonesas. “A ese partido no le dí la más mínima importancia”, confiesa la de Málaga. “Ceci salió mal de la pista. No había jugado bien. Había tenido mucha tensión con todo lo que me había pasado a mí y creo que lo reflejó en ese partido”, explica Carolina que, tras lo vivido en las semanas anteriores, trata de cambiar el enfoque por completo. “Le dije a mi compañera: ellas han jugado bien y nosotras no hemos jugado nuestro mejor partido. Lo importante es que disfrutemos de que estamos jugando”.
Es ahora, cerrado el libro de la temporada pasada, cuando Carolina hace alguna mención a aquel problema de salud. En verdad, pasa de puntillas por aquello. Le cuesta la referencia a esos días. Y no solo por mantener a resguardo su vida privada sino, sobre todo, porque no quiere exponer nada que sirva de excusa para empañar la actuación de sus rivales. “No le echo la culpa a lo que tuve a principios de año”, zanja Navarro que, aunque reconoce que “sí que me pasó factura porque hasta junio no sabía si iba a poder competir”, deja claro que “el año ha sido muy largo y al final, han sido ellas (las actuales números uno, Eli Amatriain y Patty Llaguno) más regulares y se lo han merecido”.
En cualquier caso, han sido apenas un puñado de puntos los que han separado a Carolina de la cumbre. “Lo que me da rabia es que sólo por 29 puntos haya perdido el número uno. Al final, Patty y Eli han sido mejores, han tenido una temporada más regular. Las jugadoras están jugando mucho mejor. Siento que nosotras este año no hemos mejorado como debiéramos. No hemos tenido la evolución que hubiésemos debido tener y las demás jugadoras sí han mejorado”. Aflora la interminable ambición de una campeona. El incensante ansía de crecer, de ser cada vez más grande. La infinita exigencia de alguien que no contempla límites.
Carolina Navarro ficha por Star Vie
Habla de falta de regularidad. Detrás del diagnóstico del pasado año, se atisba una inestabilidad contraproducente para quien prepara a conciencia cada detalle de cada partido. Porque, además de la enfermedad, 2013 ha sido para Carolina un año de cambios importantes. Demasiados.
A finales del pasado mes de octubre, la malagueña anunció su ruptura con Varlion tras ocho años de andadura juntos. “Motivos personales” arguyó entonces esta estrella del padel que decidió sumarse a la constelación de Star Vie, donde ya brillaba su compañera, Cecilia Reiter. “Estoy encantada con Star Vie”–afirma Carol–“me tratan genial, siempre lo han hecho, incluso cuando no estaba con ellos por contrato”. Además, la adaptación a su pala, la R80, ha sido excelente. “La verdad es que estoy encantada con ella”. Tanto que en 2014 seguirá con la pala Star Vie R80. “Me ha gustado tanto que Ceci también va a coger esa pala”, desvela sonriente Navarro.
La malagueña cambia de entrenador
El otro gran cambio del año también llegó a final de temporada. Después de siete años, Carolina decidió romper con su entrenador, el argentino Miguel Sciorilli. “Era algo que veníamos pensando desde mitad de año”, confiesa la jugadora que se apresura en aclarar que la decisión “no tuvo nada que ver con haber terminado número uno o número dos”. La ruptura con Sciorilli, entrenador también de Belasteguin y Juan Martín, les llevó a ponerse bajo la dirección técnica de un grande del padel, Hernán Bebe Auguste.
“Llevamos poco tiempo, pero estamos supercontentas con él”, asegura Carolina que pone en valor de su nuevo técnico que “al haber sido jugador, nos entiende a nosotras como jugadoras; sabe lo que necesitamos. Cuando estamos dentro de la pista, encuentra soluciones a todo como jugador que ha sido. Tácticamente, sabe latín. Nos sentimos muy identificadas con él”.
Los elogios en estas primeras semanas hacia su nuevo entrenador son constantes. “Los entrenamientos, muy bien, muy completos y muy variados. Estoy supermotivada y supercontenta”. Lo expresa con la misma honestidad que muestra en la pista. “El primer día que fui a entrenar con Bebe, Ceci se reía porque me veía correr por toda la pista, coger todas las bolas y decía que era Speedy González, que parecía que tenía 16 años y yo le respondí: es la ilusión, la motivación de empezar algo nuevo”. De nuevo, la capacidad de la malagueña de convertir cualquier acontecimiento en una fuente de energía interior, en un fuego motivador inextinguible que le impulsa hacia donde se propone.
Sin embargo, al final, todos estos cambios ocurridos durante el año pasado han resultado críticos en alguien que ansía estabilidad fuera de pista para desplegarse en plenitud dentro de ella. Frente a ello, Carolina, que aunque reconoce que todo “eso siempre influye pues es un gran desgaste psicológico”, mantiene el mismo discurso. “Patty y Eli han sido más regulares. No hay excusas ni nada”. Eso sí, a 2014 le pide un año “sin cambios, con salud y que dependa más de nosotras”.
La malagueña acepta la derrota, reconoce a sus rivales y aprieta los dientes de cara a 2014. En realidad, la adversidad es el motor de alguien que no solo compite contra sus oponentes, sino contra su propia leyenda.
Tras una temporada marcada por la inestabilidad, la incertidumbre, el sufrimiento; la campeona, una vez más, recurre a su fortaleza y a su determinación, a su carácter competitivo, a su capacidad de superación. Es el ADN que ha impulsado su brillante carrera. El espíritu que le ha llevado a recuperarse de dos graves lesiones de rodilla, que le ha permitido disputar el número uno hasta el final en un año muy complicado, que le ha elevado hasta la cima en condiciones que a cualquiera apartaría de las pistas.
World Padel Tour Málaga 2013: un recuerdo inolvidable
El ejemplo de ello es cercano en el tiempo y en distancia. El Costa del Sol Internacional Open, la espectacular prueba del World Padel Tour en Málaga que Carolina no podrá olvidar nunca. “12 o 13 días antes me rompí el gemelo y parecía que no iba a poder jugar”.
El gen competitivo de Navarro y sus tremendas ganas de coronarse en su tierra la elevaron más allá de la lesión. “Me dije: yo juego sí o sí, sea lo que sea”. Un tratamiento doloroso y un aparatoso vendaje la pusieron en pista. “En el primer partido no me podía mover, era Ceci la que corría y yo estaba parada haciendo lo que podía”. Asegura que tuvo suerte con el cuadro (el sorteo se realizó en dos ocasiones, la segunda con un resultado más benévolo para Carol y Reiter) y aunque su estado físico añadía incertidumbre a su rendimiento, la malagueña y su compañera pudieron alcanzar la final. “Llegar al (Palacio de los Deportes Martín) Carpena con 5000 personas y ese ambiente…”. Aquel impacto activó las sensaciones, desató las emociones, afiló su apetito. “Me dije: yo aquí no puedo perder, ya puedo estar coja que este partido hay que ganarlo”. Y lo ganó frente a Patty Llaguno y Eli Amatriain (6-2, 5-7 y 7-6).
“Fue maravilloso. En mi vida, he vivido jugando por aquí lo que yo viví en el Martín Carpena. La gente se volcó de una manera increíble con nosotras”, recuerda la campeona que tiene muy claro que “fueron ellos (los y las aficionadas) quienes nos sacaron adelante el partido. Fue increíble. Es algo que no voy a olvidar nunca”.
Por eso, Carolina descuenta ya los días para que el World Padel Tour vuelva a su Málaga en 2014. “Espero que sí”, confía la jugadora acerca de un circuito del que lo único que sabe es que serán, al menos, 10 pruebas (9 torneos y el Master), en virtud del acuerdo firmado el pasado año que garantiza el padel femenino WPT durante cinco temporadas… más allá de la polémica entre la AJPP y la WIPPA. Aquel cruce de declaraciones que amenazó con poner en peligro el circuito profesional de mujeres. La malagueña, que forma parte de la WIPPA, no entra demasiado en detalles porque comprende las posiciones de las dos partes y está convencida de que “hay margen de entendimiento”.
Rivales en World Padel Tour 2014
El espectáculo del padel femenino lo merece. Lo demuestra una temporada como la 2013. Trepidante, intensa, repleta de espectáculo y emociones, resuelta con foto finish, con jugadoras que han obtenido recompensa a su espléndido crecimiento. Es el caso de las actuales números uno, Eli Amatriain y Patty Llaguno. “Están muy sólidas, están tranquilas, trabajando bien”. Reconoce así Carol la categoría de sus rivales, “una pareja digna de estar en el ranking que está”.
Y tampoco se olvida del fenómeno de la temporada: las hermanas Sánchez Alayeto. Mapi y Majo han dado este año un salto de calidad monumental que les ha situado en disputa directa por los títulos. Para la malagueña, la diferencia está en que las gemelas “ahora cierran los partidos. Antes tenían oportunidades y no lo hacían”. Además, “están más sólidas, juegan con más regularidad. Son dos grandísimas jugadoras”, concluye la de Star Vie que para el año que viene señala también como rivales a Alejandra Salazar e Icíar Montes (“de ellas me esperaba el nivel que han tenido al final de temporada”), y a Cata Tenorio y Marta Marrero que “pueden ser buena pareja”.
Todas ellas son obstáculos que volverán a poner a prueba en 2014 la capacidad de reacción de Carolina Navarro. “Me gustaría conseguir la regularidad que teníamos”, apunta la jugadora en referencia a la temporada 2012, un año de resultados estratosféricos en el que sólo cedió dos sets. “No fue un año normal. Coincidió en que jugamos impecable las dos prácticamente en todos los torneos y eso es muy difícil de conseguir”. Pero no imposible para Carol. Para ello, “espero tener salud y no tener problemas físicos».
El objetivo está claro: “intentar recuperar el número uno. Es un objetivo muy bonito. Es súper motivante. Sabemos que es duro, que las jugadoras están jugando muy bien y que no será fácil”.
El primer sponsor malagueño
Carolina Navarro, una vez más, acepta el desafío. Este año, además, por primera vez, tendrá el apoyo de una empresa malagueña. A Star Vie, Estrella Damm, Land Rover y Padel Deluxe, se une All4Padel, una tienda de Málaga capital que ha decidido colaborar con la malagueña y su compañera. «Estoy muy agradecida y me hace mucha ilusión», asegura la jugadora ante la primera vez que recibe el apoyo de una entidad privada de su tierra (hace algunos años, tuvo como sponsor al Ayuntamiento malacitano).
La apuesta, en cualquier caso, es segura. Carolina Navarro, de nuevo, ha fijado su meta. Su hambre caníbal, su insaciable espíritu competitivo la guiará en la reconquista del trono en el World Padel Tour 2014.