Es algo más que un recurso. Es una tortura para los rivales. Un globo estratosférico empuja a sus jóvenes adversarios al fondo de la pista al tiempo que le abre camino hacia la red. Allí, el cordobés Pedro Caballero levanta el muro y exige a su rival en paralelo. Lo que la sutileza de Pedro construye, el mazo de Nico Moral apuntala definitivamente en el club El Mirador.
La escena se repite, sobre todo, en el segundo set y va inclinando poco a poco la final de 2ª masculina del Torneo VIII Aniversario del recinto marbellí.
El atardecer de Marbella viste un encuentro en el que los prometedores Antonio Mata e Ismael Téllez lo intentan hasta el último aliento. El juego inaugural encierra en sí mismo una representación del duelo. Son errores propios los que sitúan al borde del ko el servicio de Matita. La joven promesa de Prodigy Padel Academy y su compañero luchan contra un 0-40. Se activan las promesas para resurgir en la agonía. Hasta cuatro bolas de break en contra levantan antes de que Nico Moral, con el martillo presto, decante la quinta a su favor y con ella la discusión inicial (0-1).

Este golpe en el arranque esboza un encuentro cómodo para Caballero y su compañero de Steel Custom. Sus contrincantes no consiguen alejar su juego del cañón del esteponero. Se eleva, se cruza, ruge, intimidatorio, en el lanzamiento de cada proyectil que aniquila cualquier resistencia al otro lado de la pista. Mérito de ello lo tiene, en este inicio, el fino trabajo de Pedro Caballero, que va y viene de atrás hacia adelante, y de nuevo al fondo, hilando el juego, apurando desde la red, sosteniendo con la bandeja para que la artillería de su compañero haga su efecto.
Todo parece así decantado hasta que, de forma súbita, se desploma el juego de Moral y Caballero. La dupla de Estepona afloja el brazo y comete errores que abren de par en par la puerta del partido a sus contrincantes. Dos fallos de Pedro y otros dos de Nico condenan el servicio del primero (2-2). El break, imprevisto hasta el momento por la solidez de ambos, cambia el guión del enfrentamiento en el club El Mirador.
Se aprieta el juego. Téllez y Mata se afanan por inclinar el diálogo hacia el lado de Caballero y, a partir de ahí, contienen las acometidas de sus oponentes. Abortan así una oportunidad de break en el séptimo, gracias a un gran servicio de Ismael que Nico Moral resta a la red. La motivación de ambos, tras un formidable campeonato en el club El Mirador, les eleva en un enfrentamiento en el que no parten como favoritos.

Se activa Moral para salvar el acoso, primero, al saque de su compañero, y después, al suyo propio (5-5). Un paso más en su ofensiva es lo que les falta a Téllez y a Matita que aprietan los servicios rivales pero no logran disponer de alguna bola de break. Y eso, al final, lo acaban pagando en el desenlace del set, el final de un acto que recuerda al inicio del mismo. De nuevo, un 0-40, esta vez al saque del jugador de Padelenlared, ensombrece el escenario para los dos cadetes. Después del esfuerzo, la joven pareja baja los brazos. Mata se juega un remate inoportuno que no encuentra el destino apropiado. El silencio entre ambos escenifica no sólo la rotura de saque (5-6) sino también el quiebre de su espíritu combativo. En blanco entregan el décimo juego y con él, la primera manga a sus rivales (4-6) en un duelo que reluce en el club El Mirador.
Intensa batalla en el club El Mirador
El de Prodigy y su compañero acusan mucho esa derrota parcial. Tanto que, como ocurrió en el primer set, ceden también el servicio inicial en el segundo (0-1). Sin rumbo, ambos tratan de volver a elevar el nivel. Al igual que en el relato del primer acto, son los errores de Caballero y Moral los que invitan de nuevo a sus adversarios a mantener la pelea. Un remate al cristal y otro que no vuela lo suficiente, ambos de Nico; y dos errores de Pedro recuperan la igualada (2-2).
Se enciende otra vez la luz en el lado de las dos promesas que recobran el trazo de la primera manga. Pierde algo el paso Pedro, un respiro en el que busca demasiado las alturas como principio del juego pero al que no le da el acabado preciso. A un paso de lograr su primera rotura de saque se quedan Téllez y Mata en el sexto.

El susto reactiva a Caballero que, ahora sí, emerge en la pista del club El Mirador para completar la secuencia inacabada. Globo alto y gobierno desde la red. En su ofensiva, además, descubre Pedro la grieta en el paralelo. Le cuesta a Ismael Téllez desandar lo andado. Cada paso hacia adelante del joven sevillano aspira a convertirse en irreversible. Su oponente de Starpadel le obliga a lo contrario.
Llega así una rotura que pretende ser definitiva. En el séptimo, Pedro, muy agresivo, edifica un break que cierra con una repentina pegada que cambia el ritmo (3-4). Pero Mata, en su tierra, no acepta esa rúbrica al partido. Se rebela el de Corus, emerge el de Prodigy para esquivar la derrota. Se aferra el marbellí a la pista, combina su pádel de seda y su picadura de serpiente. Una formidable víbora del jugador local abre la ocasión de recuperar la rotura. Después, un desajuste por el centro entre sus rivales, acaba por consolidar el empate (4-4).
Se dirige el encuentro al tie break. Pero no llega a la muerte súbita. Lo impiden Caballero y Moral. Otra vez el saque de Téllez, de nuevo un 0-40. El break, en blanco, acaba por deshacer la oposición de los dos cadetes, incapaces de volver a escalar para recuperar el terreno perdido. El abismo les absorbe finalmente tras una batalla intensa (4-6). ¡Vamos! El rugido de Pedro pone fin al encuentro. Suyo es el remate que clausura una partida que honra los ocho años del club El Mirador.