Hay lágrimas que explican más que cualquier palabra. Las de Martita Ortega al finalizar su partido de cuartos de final del Cervezas Victoria Córdoba Open 2019 iban más allá del triunfo que acaban de conseguir. Era la emoción liberada tras coronar un año trepidante con el número uno del ranking de mujeres.
Porque, en efecto, la antepenúltima ronda de este último torneo regular del calendario femenino ha despejado las incógnitas que aún quedaban sobre la propiedad de la corona del pádel profesional: ya tiene dueñas.
Cuartos de final femeninos del WPT Córdoba Open 2019
En el reverso de la noticia del triunfo de las números 1 en estos cuartos apareció también el derrumbamiento de la pareja 2, Las AS, que perdió ante una dupla que aún no les había derrotado.
No hubo triunfos tranquilos. Las cuatro duplas sufrieron una barbaridad para abrirse paso al penúltimo peldaño de la prueba.
Las Martas se aseguran el trono
Saltaron a la pista central del Pabellón de Deportes Vista Alegre sabiendo que sus perseguidoras, la única pareja que discutía su supremacía este año, su némesis, había perdido la pista y tenían vía libre en su camino al trono mundial del padel femenino.
Les bastaba con una victoria para asegurárselo y el riesgo era que la oportunidad acabara pesando como una obligación. Nada más lejos. Las Martas se desplegaron con una fiereza intimidante. A su granítica fortaleza le añadieron mucha agresividad, como si quisieran marcar su territorio desde el principio del partido, como lo han venido haciendo desde el principio del año.
Pero sus rivales, Lucía Sainz y Gemma Triay ofrecieron de inicio una respuesta del mismo nivel. La balsámica victoria conseguida en el WOpen de Santander ha elevado la confianza necesaria para avivar su juego.
Todo ello se apreció en el pulso desde la primera pelota. El contraste con el duelo anterior fue más que evidente. La pelota se desplazó a una velocidad terrible, cargada de intención en cada momento.
Ortega barría metros de pista en un despliegue descomunal mientras su compañera se hacía aún más grande. Porque Marrero estuvo imperial. Exhibió un hambre voraz que le impulsó a gobernar en la red los momentos decisivos.
Lograron así un break (4-2) aunque sus rivales cerraron la brecha enseguida (4-4). Trataba Triay de agitar a su rival en el cruzado, alejarla de la cinta, mientras Lucía manejaba el juego y descubría espacios.
Llegaron ambas con opciones al tie break y ahí se impuso la jerarquía de la dupla hexacampeona (7-6).
Fue el punto de inflexión del duelo. En la reanudación, las números 1 se apoderaron del saque contrario en el segundo juego (2-0). A partir de ahí, encontraron vía libre hacia el triunfo. Sus rivales ya no recuperaron el pulso y acabaron cediendo el partido (6-2).
Se metieron en semifinales por undécima vez esta temporada pero su alegría desbordada en la pista tenía otro brillo; en concreto, el del número 1. El trono del pádel femenino 2019 ya les pertenece.
Ahora buscarán su séptimo título del curso pero antes tendrán que superar a Paula Josemaría y Ana Catarina Nogueira.
- Resultado: Ortega – Marrero a Triay y Sainz (7-6 y 6-2).
Patty y Eli deciden el número 1
Fue la pareja 5 del ranking la que se encargó de despejarles definitivamente el camino al número 1 a Las Martas sin necesidad de que éstas tuvieran que saltar a la pista. Porque Patty Llaguno y Eli Amatriain consiguieron lo que no habían logrado en todo el año: fulminar a Las AS.
Lo hicieron en el último torneo regular del año, en un partido absolutamente loco que ninguna de las dos parejas acabó de domar del todo.
Quienes más lo sufrieron fueron Alejandra Salazar y Ariana Sánchez, acostumbradas a darle ritmo al juego y a imponer su pádel afilado, se mostraron erráticas, imprecisas, muy incómodas con el dictado de sus rivales.
Aún así, siempre tuvieron las dos parejas opciones de abrir brecha. Lo hicieron más desde los errores contrarios que desde los aciertos propios.
El primer set fue un carrusel de roturas. A cada asalto al servicio contrario le sucedió un break como respuesta. Así, desde el juego inaugural del partido. Sin embargo, sobre la moqueta, los hechos inclinaban ligeramente la balanza del lado de Patty y Eli que marcaban el paso.
Sobre todo la cartagenera, propietaria de las riendas del encuentro, estirando la pista al otro lado de la red, dándole un palique interminable a cada punto, agitando y asfixiando a sus oponentes, e incluso, acudiendo al rescate de su compañera cuando ésta perdió el paso.
El intercambio de golpes llevó el pulso al tie break y ahí fue más fiable la pareja 5 que golpeó primero (7-6).
En el segundo parcial, trataron Ale y Ari de cambiar el ritmo. Se juntó su empuje con un percance que sufrió Llaguno. Un tremendo golpe contra la malla lateral dañó el dedo anular de su mano derecha y provocó que fuera asistida por la fisioterapeuta oficial de World Padel Tour.
Dolorida, regresó a pista con un 2-4 en contra. Fue Eli quien emergió para compensar la merma temporal de Patty. Sus rivales no supieron aprovechar el momento. Les faltó siempre hilo que conectara su juego. Trataron de salirse de la propuesta de sus rivales pero no tuvieron acierto.
Patty y Eli no sólo equilibraron el marcador sino que le dieron continuidad a su reacción y abrocharon el partido con un fabuloso parcial de 4-0 tras dos horas y media de batalla. Su triunfo (7-6 y 6-4) descarrila a Las AS de la carrera por el número 1 del ranking World Padel Tour y les abre la puerta de las semifinales por séptima vez esta temporada.
Se medirán a las gemelas Sánchez Alayeto.
- Resultado: Amatriain – Llaguno a Salazar – Sánchez (7-6 y 6-4).
Las gemelas Alayeto se abren paso
Aquel duelo truncado en el WOpen de Santander por la indisposición de la malagueña Bea González tenía hoy luz verde. Volvieron a anotárselo las gemelas Sánchez Alayeto pero tuvieron que trabajarse mucho el triunfo por la formidable persistencia de sus rivales.
El efervescente juego de la pareja que forman Bea y la argentina Delfi Brea les lleva a alternar, en muchas ocasiones, fases de ausencia con otras de una presencia arrolladora. Algo así ocurrió en el partido. Las hermanas se adelantaron en el primer tramo del set pero, cuando estaban dispuestas a acelerar para abrochar el primer acto, sus rivales se conectaron y nivelaron el juego.
Finalmente, la pareja 3 del ranking se hizo con el set (7-5).
En el segundo acto, Mapi y Majo encontraron pronto la vía de agua. Ahí sí, impusieron su ritmo y se despegaron de sus rivales que, pese a seguir intentándolo, no pudieron alcanzar a sus rivales (6-3).
Las semifinales esperan ya a las gemelas Sánchez Alayeto que conservan aún el sabor del triunfo en Menorca, un bocado exiguo en el curso para estas dos voraces cazadoras.
- Resultado: Alayeto – Alayeto a González – Brea (7-5 y 6-3).
Josemaría y Nogueira se libran del acoso
El sueño de unas fue la pesadilla de las otras mientras duró. El ejercicio de resistencia que protagonizaron Mari Carmen Villalba y Vero Virseda estuvo a punto de descabalgar a la pareja 4 del ranking.
Paula Josemaría y Ana Catarina Nogueira intentaron despegarse de todas las maneras posibles. Mandaron en el marcador casi siempre pero sus rivales no se abandonaron en ningún momento. V&V llegaban tras firmar una fenomenal remontada en octavos para dejar fuera a la pareja 8 y, con el Master Final como una quimera, estaban dispuestas a apurar sus opciones en el último torneo.
Así lo hicieron. El dinamismo de Villalba confrontó con el vértigo de Josemaría y el aplomo de Virseda con la solidez de Nogueira. En el séptimo, las favoritas encontraron la grieta desde el resto (4-3). Pero no era suficiente. Sus rivales recuperaron enseguida la distancia cedida (4-4).
Sólo al final del set, antes de que alumbrase el tie break, Paulita y La Portu consiguieron inclinar de su lado el primer acto (7-5).
Villalba y Virseda no acusaron el golpe. Fue su mayor logro ante la pareja revelación del año. La esteponera y su compañera se fajaron de manera espléndida y mantuvieron así sus opciones incluso cuando parecía que estaba todo perdido.
Como en el undécimo juego del segundo parcial, cuando sus oponentes consiguieron un break que les dejó en disposición de cerrar el partido con saque propio (6-5).
Mari Carmen y Vero se agarraron con todo y devolvieron el golpe para forzar el tie break. Sobre el alambre, levantaron incluso un match ball en contra y desperdiciaron varias bolas de set a favor pero, al final, lo consiguieron (6-7).
Hasta ahí llegó su empuje. El demarraje de Nogueira y Josemaría en el tercero, ya sí, fue definitivo. Ese 3-0 sirvió de trampolín para que la pareja 4 se abriese paso hasta la victoria (6-2).
En semifinales, las séptimas que jugarán este curso, se enfrentarán a Las Martas.
- Resultado: Josemaría – Nogueira a Villalba – Virseda (7-5, 6-7 y 6-2).